¡Un clásico de magia!
El mago sujeta una pelota roja en las yemas de los dedos, repentinamente se multiplica y pasa a tener dos. Cuando el mago quiere, otra pelota aparece, siendo entonces tres. Finalmente, una cuarta pelota hace su aparición - una entre cada dedo de la mano.
Fabricado en plástico en los EEUU.